El argentino desató el caos en Inter de Milan...
Inter de Milan ya había quedado eliminado del FIFA Mundial de Clubes contra Fluminense cuando Lautaro Martínez decidió hacer catarsis en diálogo con DAZN y apuntó a sus compañeros: "El mensaje debe ser claro: quien quiera quedarse, que se quede; el que no quiere seguir en el club, que se vaya. Quiero luchar por objetivos importantes, esta es una camiseta importante y este debe ser el mensaje. Acá hay que querer quedarse. El mensaje es claro: el que se quiera ir, que se vaya. He visto muchas cosas que no me han gustado. Quien no quiera quedarse, adiós. No quiero perder. En este equipo perdemos todos juntos y ganamos todos juntos. Y cuando perdemos, yo soy el primer responsable por ser el líder del grupo, el capitán...".
Tras ello, el CEO del Inter de Milan, Giuseppe Marotta reveló lo sucedido: "Yo digo que la intervención de Lautaro es muy emotiva y significativa. Es el capitán y busca un sentido de pertenencia. Pero siempre he dicho que cuando un jugador dice que quiere irse, la puerta está abierta. Él no lo quiso decir, pero yo sí; el discurso se refiere a Calhanoglu. Pero no debemos culpar a Calhanoglu; hablaremos con él...".
Calhanoglu no pudo jugar ningún partido del FIFA Mundial de Clubes por una supuesta lesión muscular y Lautaro, evidentemente, no se confió de ello. No obstante, tras sus palabras, Calhanoglu llegó a un acuerdo absoluto con Galatasaray. El mediocampista aceleró su negociación luego de la crítica de Lautaro Martínez y sentir destrato por parte del club italiano ya que los directivos respaldaron al argentino. Calhanoglu aceptó la oferta de Galatasaray por tres temporadas y un salario de 10 millones de euros por cada una de ellas.
Calhanoglu y Lautaro Martínez.
Sin embargo, eso no fue todo porque Calhanoglu le respondió en redes sociales al argentino y no se guardó nada: "El líder se mantiene cerca de sus compañeros, no busca al culpable. Respeto todas las opiniones, incluso las de mis compañeros o las del presidente. Pero el respeto no puede ser unilateral. Siempre lo he demostrado, dentro y fuera del campo. Nunca he traicionado esta camiseta, nunca he dicho que no fuera feliz en el Inter...".
En esa misma línea, Calhanoglu agregó: "En el pasado recibí ofertas muy importantes, pero decidí quedarme. Sé lo que representa esta camiseta y pensé que mis decisiones hablaban por sí solas. Ya veremos qué nos depara el futuro. La historia siempre recuerda a quienes se mantuvieron firmes. No a quienes hicieron más ruido...".
Por último, Calhanoglu sentenció: "Una lesión muscular me impidió jugar. No hay más detrás. Sufrí y me dio tristeza la derrota, llamé a algunos compañeros para alentarlos, pero me sorprendió lo sucedido después con palabras que duelen, que dividen, que no unen. Yo también he sido capitán en Inter y en mi seleccionado y jamás señalé con el dedo a alguien, eso es lo más fácil en la derrota...".
Lógicamente, las palabras de Calhanoglu van directamente a Lautaro Martínez, que se indignó con algunas cosas fuera del campo y acabó detonando al equipo internamente. Ahora la presión pasa a la directiva, quien deberá resolver esto de alguna forma, aunque lo claro es que no pueden seguir jugando juntos.