River Plate, con el corazón en la mano: rozó el colapso pero eliminó a Libertad...

 River Plate tenía todo para vivir una noche tranquila en el Monumental y sellar el pase a cuartos de final de la Conmebol Libertadores contra Libertad de Paraguay. Sin embargo, el equipo de Marcelo Gallardo no jugó un buen partido y Libertad lo hizo padecer durante 95 minutos...

En el primer tiempo, River Plate comenzó mejor que Libertad desde todos los aspectos: actitud, futbolístico e intensidad. Con el correr de los minutos, River fue presionando a Libertad y al minuto 29, tuvo su recompensa: gran pase de Marcos Acuña, definición al travesaño de Facundo Colidio y el rebote fue capturado por Sebastián Driussi, que no falló. 1-0. 

Tras ello, increíblemente, River Plate se derrumbó en su juego, su fútbol. Libertad reaccionó con una personalidad impresionante y fue remontando el partido poco a poco con solidez defensiva y ataques de altísima claridad. Y de tanto ir, Libertad encontró el empate en un momento crucial. Al minuto 43, luego de un tiro de esquina, Robert Rojas pegó un salto descomunal y de cabeza, estampó el 1-1. 

River se fue al entretiempo lleno de dudas y con un empate que no estaba en los planes. El punto es que al volver, todo empeoró. Apenas comenzó el segundo tiempo, Libertad salió al ataque con una actitud infernal, acorraló a River Plate y como si fuese poco, el equipo de Gallardo se quedó con un futbolista menos por la expulsión de Giuliano Galoppo.

En ese contexto, Gallardo tomó una decisión más que polémica: quitó a Juanfer Quintero del partido y mandó a Galarza. El colombiano fue lo mejor de River y era el jugador que más preocupaba a Libertad, pero Gallardo lo sacó del encuentro. 

Los minutos posteriores después de la expulsión, River buscó reaccionar desde lo anímico pero realmente sufrió el partido como no lo imaginó. Con el empate 1-1 y un futbolista más, Libertad fue creciendo en ataque y puso a River Plate contra las cuerdas ante su gente. Los argentinos se llenaron de nerviosismo y la gente fue perdiendo la paciencia por ver como Libertad tocaba en el Monumental.

Sobre el final del partido, Libertad hizo todo para ganarlo en la cancha pero perdió una infinidad de ocasiones abajo del arco y otras tantas fueron sacadas por Armani, el mejor de River Plate. El encuentro acabó 1-1 y todo se fue a los penales.

El comienzo de la definición fue inmejorable para River Plate porque Nacho Fernández comenzó convirtiendo y Recalde remató al poste por Libertad. Miguel Borja convirtió, Viera mantuvo con vida a Libertad. Martín Silva se lo detuvo a Marcos Acuña, pero Caballero lo pateó afuera. 

Tras ello, Martínez Quarta convirtió el cuarto penal y la sentencia la dio Franco Armani, que le detuvo el penal a Fernández. River jugó uno de los peores partidos del año, pero termina clasificando a cuartos de final de la Conmebol Libertadores, donde se verá las caras con Palmeiras, jugando primero en Buenos Aires y definiendo en San Pablo. 

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