Ángel Di María vivió una situación tan inédita como dramática mientras jugaba para el PSG. Mientras su equipo enfrentaba al Nantes, Leonardo, director deportivo del París llamó desde su palco a Mauricio Pochettino y le avisó que debía sacar a Di María del partido porque su familia estaba sufriendo un duro asalto.
El cambio, que se dio al minuto 69 conmovió a todos y Di María rápidamente se fue para su casa. Según informa Le Parisien, la mujer y los hijos de Di María no vieron directamente a los ladrones y tampoco sufrieron agresiones como se había dado en una primera versión. Pero si es verdad que la familia se dio cuenta de que una caja fuerte, con relojes y joyas que ascienden de valor a 500.000 euros, fue destrozada en la planta alta de la casa.
Siguiendo el medio citado, Di María tenía joyas y relojes en esa caja fuerte que los ladrones vaciaron por completo. En Francia se destacan dos puntos de la investigación: la primera es la profesionalidad de los ladrones que cometieron el delito, mientras que la otra es la falla de seguridad en Neuilly-sur-Seine, uno de los barrios más destacados de París.
Lo cierto es que Di María ahora tendría seguridad personal por parte del club para volver a evitar un hecho de esta magnitud. Vale recordar que al mismo tiempo, ladrones ingresaron a la casa de los padres de su compañero Marquinhos y golpearon a su papá para poder robarle.