Cassio fue elegido MVP, quebró en llanto y sorprendió: "nos estamos enfermando"

El presente de Cruzeiro no venía siendo el mejor. El conjunto brasileño acumulaba tres derrotas consecutivas en la Copa Sudamericana y además había caído en su última presentación en el Brasileirão ante Bragantino. La presión comenzaba a hacerse sentir en un equipo que necesitaba urgentemente un golpe anímico para recuperar la confianza y enderezar el rumbo en el torneo local.

Por eso, el triunfo del último fin de semana fue una verdadera bocanada de aire para los dirigidos por Fernando Seabra. Cruzeiro visitó a Vasco da Gama en Río de Janeiro y se llevó una valiosa victoria por 1-0. Más allá de los tres puntos, hubo una imagen que acaparó todas las miradas una vez que el árbitro marcó el final: la emotiva reacción de Cassio, arquero histórico del fútbol brasileño.

El experimentado guardameta, de reciente llegada al club tras su exitoso paso por Corinthians, fue figura estelar del encuentro al realizar cuatro atajadas determinantes que permitieron mantener el arco en cero. Al sonar el pitazo final, Cassio no pudo contener la emoción: se arrodilló en el césped del estadio São Januário y rompió en llanto, en una imagen que conmovió a propios y extraños.

Las lágrimas de Cassio encontraron rápida explicación: en las semanas previas, había recibido duras críticas por su rendimiento y su salario, lo que generó una fuerte presión sobre su figura. Tras ser elegido MVP del partido, el arquero tomó la palabra y explicó el duro momento que atravesaba: "Somos seres humanos, cometemos errores y acertamos. Vivimos en una época en la que la gente se preocupa más por tirarnos piedras. Así nos estamos enfermando", expresó, visiblemente conmovido.

El brasileño, multicampeón con Corinthians y verdugo de Boca Juniors en más de una ocasión en torneos continentales, no se guardó nada y agregó: "Hablan de los salarios altos. Si fuera así, la gente exitosa no moriría ni tendría problemas. Las críticas ayudan, pero ya estamos cruzando un límite". Sus palabras expusieron una problemática cada vez más presente: el impacto emocional que tienen las críticas en la vida de los deportistas.

A pesar de la dura autocrítica, Cassio también tuvo espacio para agradecer. El arquero de 37 años destacó la actitud de su equipo y el apoyo de su círculo íntimo: "Estoy contento porque dimos una buena respuesta, con un equipo de hombres. Gracias a los que nos bancaron, a mis hijos, a mi esposa, a los hinchas. Esta victoria es para ellos", cerró, entre aplausos de sus compañeros.

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Con este triunfo, Cruzeiro no solo sumó tres puntos vitales en el Brasileirão, sino que también recuperó algo que parecía haberse extraviado en los últimos partidos: la autoestima. Y en esa reconstrucción, el liderazgo y la emotividad de Cassio aparecen como piezas fundamentales para soñar con una remontada tanto en el campeonato local como en la Copa Sudamericana.

Cassio y las criticas

El arquero brasileño ya vivió un episodio similar donde fue fuertemente criticado, pero en ese momento se encontraba en el Corinthians y había comentado lo siguiente: "Este es mi último año en Corinthians, porque soy el culpable de todo. Voy a ver a un psicólogo, a un psiquiatra, porque soy un ser humano. Es difícil. Las exigencias son parte, pero respeten. Cometí errores, pero parece que todo lo malo es mi culpa ".

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